Las pérdidas provocadas por los incendios de la semana pasada en campos de caña de azúcar en el estado de São Paulo, el mayor productor de caña de azúcar de Brasil, se estimaron en 350 millones de reales, y el incendio afectó a más del 1% de los cultivos de São Paulo, según una evaluación de la Organización de Asociaciones de Productores de Caña de Azúcar de Brasil (Orplana).
Se identificaron más de 2.100 incendios en campos de caña de azúcar, lo que resultó en alrededor de 59.000 hectáreas quemadas en zonas cañeras y zonas de rebrote de cultivos. São Paulo, que representa alrededor de la mitad de la plantación de caña de azúcar de Brasil, cultiva 4,3 millones de hectáreas en la actual cosecha.
“La productividad esperada (en áreas listas para cosechar) era de 80 toneladas por hectárea, pero caerá a la mitad, porque pierde volumen por el incendio”, dijo a Reuters el director general de Orplana, José Guilherme Nogueira.
A pesar del menor volumen, las plantas aún pueden moler caña de azúcar procedente de zonas maduras afectadas por los incendios.
Una de las áreas afectadas fue la usina Santa Elisa, de propiedad de Raízen, en Sertãozinho (SP). La unidad reanudó sus operaciones el domingo después de haberlas detenido el jueves de la semana pasada debido a incendios en campos de caña de azúcar cercanos, dijo el lunes el mayor procesador de caña de azúcar del mundo.
Según Nogueira, la estimación de daños también considera las áreas de rebrote, donde se quemó la paja.
Dependiendo de la intensidad del daño en la zona de rebrote, el productor tendría que sembrar un nuevo cultivo.
“Generalmente la caña de azúcar resiste la quema, pero su vida útil se reduce”, agregó, estimando la pérdida de rebrote.
A veces, un cultivo tiene alrededor de cinco rebrotes antes de una nueva siembra.
Orplana estima que los incendios afectarán a los precios del etanol y del azúcar en el próximo ciclo.
Los precios del azúcar en bruto comercializado en Nueva York subieron más de un 3% este lunes, ante la preocupación del mercado por los daños causados por los incendios en los campos de caña de azúcar.
Orplana está trabajando con la Oficina de Crisis del Estado de São Paulo para mitigar cualquier otro tipo de incendio que pueda ocurrir.
“El frente frío que llegó el domingo trajo lluvias al interior de São Paulo, alrededor de 15 milímetros, aliviando la situación. Sin embargo, se espera que el tiempo se mantenga seco y caluroso en los próximos días, lo que nos preocupa mucho por que no más incendios”, dijo Nogueira.
Este lunes, el gobierno del estado de São Paulo afirmó en un comunicado que no hubo incendios, pero 48 municipios estaban en alerta máxima por incendios.
El gobierno de São Paulo creó una oficina de crisis, con un puesto de avanzada en Ribeirão Preto, para abordar el problema.
Consultada, la Unión de la Industria de la Caña de Azúcar (Única) dijo que no contaba de inmediato con un relevamiento de las zonas afectadas.
Pero la asociación de usinas centro-sur afirmó que puso a disposición del gobierno toda la estructura contra incendios ya disponible en las usinas.
Con la mejora de la situación en materia de incendios, todas las autopistas quedan abiertas al tráfico este lunes, tras haber sido cerradas la semana pasada por el humo.
El gobierno dijo que la Policía Civil está movilizada para investigar todos los incidentes de incendio provocado en el Estado, especialmente aquellos que ocurren en las regiones afectadas por los incendios. Se realizaron tres detenciones en São José do Rio Preto, Batatais y Porto Ferreira, según un comunicado.
