La economía estadounidense añadió 142.000 puestos de trabajo en agosto, con una tasa de desempleo del 4,2%, mientras la atención se ha centrado en el esperado recorte de la tasa de interés preferencial por parte de la Reserva Federal este mes.
Las mayores ganancias en el empleo se produjeron en la construcción y la atención sanitaria.
Las industrias cinematográfica y de grabación de sonido continuaron experimentando pérdidas de empleo durante el mes, perdiendo 4.200 puestos a 444.300. Las industrias editoriales perdieron 3.700 puestos de trabajo, hasta 916.700, y los proveedores de contenidos y radiodifusión perdieron 1.200 puestos de trabajo, hasta 337.500. Las cifras son estimaciones de la Oficina de Estadísticas Laborales del Departamento de Trabajo y, por lo general, se ajustan a medida que llegan más datos.
Si bien el aumento general del empleo fue una indicación más de que la economía no está en recesión, los analistas han observado el panorama del empleo y han hecho sonar la alarma sobre una desaceleración en la contratación. Esto ha presionado a la Reserva Federal para que comience a recortar las tasas, y algunos economistas creen que el banco central ha esperado demasiado para hacerlo. La pregunta parece no ser si la Reserva Federal reducirá la tasa este mes, sino en cuánto.
Justin Wolfers, profesor de la Universidad de Michigan, escribió en X que el hecho de que las nóminas crecieran y que la tasa de desempleo cayera ligeramente era una buena noticia. Más preocupante, escribió, fue que las cifras de los dos meses anteriores fueron revisadas a la baja.
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